Cruzando el cielo, pintando nuestros cuerpos, rozando el frío, cayendo. Esquivando, escribir sin pensarlo. Lo que nos hace seguir. Un compás, una forma de que todas las piezas encajen. Una, dos, tres en raya. Localiza el núcleo, atraviésalo. Tú dejas al aire sin aliento. Tú hiperactivizas al speed y haces que el cielo se adapte a tu forma. El mundo gira demasiado despacio. No sincroniza con el ritmo de mis latidos.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Mus

-No hay mus, envido.
-Lo veo. 
-Paso
-Envido
-...Jugador de chica...- perdedor de mus. - De una a dos, lo veo.
-Pares no.
-Pares sí.
-Juego sí.
-Juego sí.
-...Soy mano. - lo es, siempre lo es. - La mano de un niño.
-¿De farol o qué? Con la una, lo veo.

Y la grande que había envidado, tuya. Y la chica que yo había visto, de una a dos...tuya. Y llevabas la puta una de mano. Y yo, siguiéndote el  juego. Pues una de mi par de putas, y tu dos de la grande, más dos de la chica, más cinco del envite a juego y tres de la una, suman doce. Y yo había cortado mus, no me esperaba que llevaras ese juego, y creía que todo se trataba de mis cartas. Que sudo de jugar más contigo, follamos o nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario